Hace bastante que no me siento a ver la tele. Dejé de hacerlo cuando empezó a haber internet en mi casa. Estoy igual, sentada delante de una pantalla pero al menos internet es más variado que la tele.
El viernes fue una excepción. Aunque había quedado con unos ex-compis de curro tuve que faltar a la cita porque tenía los ojos pochos y no quería meterme en un ambiente cargado de humo. Me senté en el sofá a descansar y me encontré cara a cara con una tele que poco parecía poderme ofrecer.
El programa de Antena 3 del viernes por la noche seguía siendo tan patético como lo recordaba. Personas aireando su vida personal, periodistas que reconocían que invitados que acudían al programa tenían todos los síntomas de padecer enfermedades mentales pero no por ello dejaban de ser invitados al programa. El último número de ese circo fue la oportunidad que se concedió a los espectadores de apadrinar un friki.
En paralelo se emitió en la 2 una película que me interesó mucho más:
"Las alas de la vida".
Es un largometraje documental sobre Carlos Cristos, un médico que padece una enfermedad terminal.
Las alas de la vida
Lo que más me caló fue la frase "y si es posible con una sonrisa"; el documental está basado en que se puede luchar siempre con una sonrisa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario